lunes, 25 de marzo de 2013

PRACTICA DE FUTBOL EN LA GRAN ALTURA


Con motivo de la presentación del seleccionado de fútbol en La Paz por las eliminatorias mundial de Brasil, cabe preguntarse como incidirá la gran altura - 3750 metros sobre nivel del mar - de dicha ciudad en el desempeño de los jugadores.

La denomino gran altura para diferenciarla de Bogotá  a  2600metros o México a 2300 metros sobre nivel. El aeropuerto de La Paz está a 4050 metros.

Buenos Aires está a nivel del mar y la presión barométrica es de 750 mm de Hg y la presión barométrica de La Paz es de 450 mm de Hg. Esto significa que disminuye la concentración de oxígeno dentro de los glóbulos rojos. Dado que los glóbulos rojos son los transportadores de oxígeno por nuestros tejidos es observable la dificultad del deportista de alta competición para reaccionar muscularmente con todo su poderío.

Asimismo se crea otra dificultad dado que la médula ósea encargada de formar dichos glóbulos al detectar el déficit de oxígeno genera instantáneamente glóbulos supletorios. Ello torna más viscoso al torrente sanguíneo con lo cual la fibra miocárdica del corazón deberá emplear una mayor potencia  para bombear la sangre hacia los distintos tejidos de nuestro cuerpo y para lo cual, no está preparado. Ello se verá agravado por la deshidratación generada por la transpiración propia del acto deportivo, que concentra aún más al liquido elemento.

Los efectos que produce ascender varios miles de metros son conocidos como “mal de la montaña, puna o soroche” y fueron descriptos por el jesuita José de Acosta en 1590.

Diariamente se publican trabajos científicos dedicados a conocer la adaptación a las condiciones ambientales hostiles y paradójicamente en Bolivia está el Instituto Boliviano de Biología de la Altura y allí el doctor Jean Coudert, destacado fisiólogo francés, investigó las diferencias significativas del individuo que vive a nivel del mar con respecto al de la gran altura. Diferencia notable que también padecen los bolivianos habitantes de Santacruz de la sierra.

Las sensaciones desagradables y que a través de los años hemos observado con distintos planteles en La Paz fueron siempre ahogo temprano al esfuerzo físico, dolor de cabeza, mareos, y sangrado de las fosas nasales debido al incremento de glóbulos rojos supletorios. Todo ello genera tensión y desconfianza al deportista con lo cual merma su rendimiento notoriamente.

En cuanto a nuestra experiencia personal deportivamente tuvimos distintos resultados y siempre pernoctamos en Santacruz y viajamos el mismo día del partido, comiendo muy frugalmente y gran ingesta de líquidos, aún vía endovenosa.

Pero resultados buenos deportivamente hablando no debe ello ocultar la posibilidad de la brusca caída de la presión y el edema de pulmón.

En conclusión, la gran altura implica una exigencia a la que sólo pueden adaptarse quienes nacen y viven en alturas similares.

domingo, 24 de marzo de 2013

PERIOSTITIS DE TIBIA


Aporte de nuestro consultorio con respecto a la lesión del jugador Adalberto Román.

Definición:  Patología microtraumática indirecta, es decir no por trauma directo, y observado por suma de gestos repetidos en los movimientos de “reacción o piques cortos”,  en la práctica de fútbol, especialmente en la actualidad. Dicha patología no observada en el fútbol de otros años era frecuente en cambio, en el atletismo y específicamente en aquellos que realizaban carreras de los100 metros.

 El músculo que recubre la tibia y se inserta en la cresta de dicho hueso, genera pequeños arrancamientos de su inserción en el periostio durante la suma de piques ó salidas súbitas.

Como su nombre lo indica, periostio es una membrana fibrosa y gruesa que recubre la superficie de los huesos menos en las zonas articulares. En los adultos presenta dos capas y de ellas la externa transporta vasos sanguíneos y nervios.

Concretando, la suma de movimientos intensos en el pique y la salida generan arrancamientos de la inserción del músculo en la “ canilla “ de la tibia o cresta tibial, indoloros de momento. Los ingleses desde 1935 lo describen como “shin splints” o astillas de la canilla, término éste que todo jugador reconoce por el lugar  donde siente el dolor luego de un golpe frontal en la pierna. De allí nace el uso de la canillera.  Luego, en la suma de repeticiones más los agentes traumáticos del juego, el periostio puede descamarse por así decirlo. Ahí estamos en presencia del “shin splints” observado radiográficamente en la corteza del hueso y corroborado por tomografía computada como fisura de la cortical. Dicho trazo generalmente no avanza sobre el hueso propiamente dicho y en cambio forma parte del engrosamiento del periostio o periostitis de la zona afectada. A la palpación es fácil notarlo y más aún por el dolor que siente el deportista. Con el tiempo impide realizar la práctica del deporte sin limitación y aumenta considerablemente el dolor, con el contacto propio del juego.