De las lesiones de los marcadores laterales esta es para nosotros, la que los caracteriza en un consultorio de traumatología del deporte.
Generalmente y ha diferencia de otras lesiones musculares, ésta en un 50% de los casos fue resuelta quirúrgicamente.Por eso la importancia de la lesión y el buen diagnóstico.
Etiología:
El mecanismo de acción lo atribuímos a un complejo movimiento de aceleración y desaceleración casi constante.
En varias oportunidades el relato del jugador se basa en una jugada característica como es la de “taquear” el balón en dirección opuesta al de la dirección en que se dirigía.El ejemplo diario es que el marcador lateral corre velozmente hacia la raya del out persiguiendo al balón para que no salga, en ese instante frena abruptamente y taquea la pelota en dirección opuesta, a la trayectoria de su carrera.
Puede presentarse igual mecanismo de acción si en lugar de frenar y taquear, levanta bruscamente el miembro inferior con el afán de impulsar el balón hacia atrás, acción esta denominada “chilena”.
En ese instante el tercio distal del bíceps de muslo se elonga más allá de lo que tenía previsto. La suma de gestos repetidos puede ocasionar la ruptura fibrilar.
Quizas sea el episodio mencionado, el resultado final ó consecuencia al cabo de realizar durante las semanas anteriores, ejercicios repetitivos de reacción con suma de piques a los que se somete a los jugadores y especialmente a los marcadores laterales y delanteros punteros.
Dichos ejercicios se realizan además realizando circuitos cortos y largos avanzando en zig-zag esquivando en la carrera estacas colocadas para tal fin.
En camara lenta se verá que el pié derecho está en el aire ó impulsado hacia delante.Luego, para el próximo envión y al apoyarse en el piso, los músculos flexores del muslo en especial la porción distal del bíceps, se contraerá fuertemente para sobrellevar la fricción que le ofrece el piso, para impulsarse nuevamente.
Diagnóstico:
A la semana del episodio se palpa la depresión del corte, allí se solicita la ecografía y/ó resonancia magnética para corroborar el tipo de lesión.
Puede ocurrir, que luego del tratamiento incruento en base a fisiokinesiología , reanude sus actividades en el campo de juego y los episodios de dolor se repitan. Ese es el momento de considerar la conducta quirúrgica.
Es la mejor manera de acortar los tiempos para su total recuperación.
Tratamiento Quirúrgico:
Bajo anestesia local con el enfermo en decúbito ventral abordamos la lesión mediante una incisión longitudinal de 15cm por debajo del tercio medio del muslo hasta la inserción distal del tendón del bíceps.
Se disecan a dedo las adherencias aponeuróticas y una vez sobre la lesión muscular se observa el muñón proximal cubierto por tejido cicatrizal.
Al igual que éste, el muñón distal también está tapizado por tejido cicatrizal por lo que realizamos disecciones de ambos muñones hasta encontrar tejido muscular normal.
Luego sutura cabo a cabo con lino.
Cierre por planos. El paciente no pisa con el miembro operado por 8 dias. Alta a los 40 dias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario