El subtítulo significa que la regla de oro de la medicina es el examen semiológico cuidadoso del enfermo. Luego todo tipo de diagnóstico por imágenes debe formar parte del examen complementario, sólo para corroborar lo evaluado en la consulta.
Ahora bien, el médico debe ser quien solicita el tipo de imagen según necesidades y no el paciente, quien cree sentirse mejor atendido si se le pide pruebas elaboradas. Lo que es peor, es que las pueden exigir abogados ó jueces, mal o deficientemente asesorados.
Una resonancia magnética es una excelente herramienta y distinta a las demás en manos de un especialista experimentado. Este puede obtener datos muy útiles, especialmente en los casos de enfermos con dos o más diagnósticos parecidos y posibles, o cuando debemos descartar tumores junto a tomografías, especialmente en ortopedia.
James Andrew, muy conocido ortopedista de planteles de béisbol en Florida, explicaba en una reunión que sometía a principio de temporada a todos los lanzadores (pitchers) al estudio con resonador. Ninguno presentaba limitación en los lanzamientos ni dolor, sin embargo el 87% presentaban lesiones parciales ó totales del manguito rotador del hombro ó del tendón supraespinoso.
Dicho profesional cerraba la charla de esa noche, diciendo que "si buscas un motivo para operar el hombro de un pitcher, hazle una resonancia magnética. Ante la imagen nadie dudará del acto quirúrgico."
Todo debe correlacionarse frente al enfermo de alta competición, pues en mi experiencia particular con guardavallas, basquetbolistas , tenistas y rugbiers, todos categoría seniors, he visto que se desempeñaban diariamente y activamente en sus disciplinas deportivas algunos sin y otros con dolores articulares leves, a pesar de resonancias positivas con lesión del supraespinoso ó de todo el manguito rotador.
Dichos deportistas usaron su hombro mucho más que el resto de los pacientes no deportistas, sin embargo, en una secuencia de estudios en empleados de oficina también observamos post los 50 años, imágenes similares a los antedichos.
El paso del tiempo ha hecho que el elevar el brazo por encima del hombro en miles de oportunidades desde nuestro nacimiento, nos puede ocasionar la lesión de hombro y nosotros desconocerla por falta de sintomatología que nos lleve a la consulta médica.
miércoles, 16 de noviembre de 2011
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